Hernán Montecinos

Por: El Mostrador
Fuente: http://www.elmostrador.cl (08.12.11)

En el programa Hasta Agotar Stock de Elmostrador.tv, transmitido todos miércoles desde la terraza del California Cantina, el cientísta político Eduardo Vergara y el periodista Freddy Stock estuvieron junto a Mario Schilling, ex vocero de la Fiscalía Oriente. En la ocasión, Schilling realizó fuerte declaraciones sobre los dichos de Milton Juica, presidente de la Corte Suprema y aseguró que la justicia chilena “es clasista”.

En declaraciones en revista Occidente, vinculada a la masonería, Juica declaró que hay presiones políticas por parte del gobierno hacia los jueces debido a los problemas de delincuencia. Al respecto, Schilling aseguró que “es una maniobra comunicacional del gobierno frente a su incapacidad de frenar el problema de la delincuencia. A esto podríamos ponerle un nombre: ‘Operación Poncio Pilatos’”. Sobre lo mismo, el ex vocero explicó que el problema radica en que: “No rehabilitan a nadie, quien diablos se va a rehabilitar en la cárcel, y lo que es peor, nadie consigue pega después”.

Además, calificó la situación como “un festival de charlatanes que comenzó en el Ministerio del Interior desde el comienzo de la democracia hasta ahora” y que “El gran problema de la delincuencia es el robo, los delitos contra la propiedad y esos se combaten de una forma bastante clara, atacar la receptación”, aseguró. A su juicio, esta situación continúa “porque la penalidad es muy baja, al ser baja es una pérdida de tiempo para el sistema seguir utilizando los recursos fiscales para que vayan a juicio”.

El ex vocero de la Fiscalía Oriente aseguró que “hoy se habla que necesitamos más recursos para más carabineros policías y más fiscales… Represión, represión y represión, lo que Chile necesita son más asistentes sociales y menos policías. Para eso se necesita una política de inteligencia, no una de garrote”, sentenció.

Además, criticó al ministerio del Interior asegurando que “han demostrado que tienen una incapacidad absoluta, ¿Cuál es la gran oferta? ¿Cuál es el valor si no es capaz de hacer lo mínimo que se le pide, el control de la delincuencia?”.

Concluyó que “la justicia no es ciega, ni sorda, ni muda. Se mira exactamente de quién viene, qué tan poderoso puede ser. Si eres un pelafustán que no va a causar ningún ruido, te van a tratar de una manera muy distinta. Este país es tremendamente clasista”.

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